(Des)preocupados, pero (no)indiferentes
NOVIEMBRE / 2012 Obra de Marta Bielsa
MARTA BIELSA(Madrid 1987) Marta Bielsa procede de una formación en Historia del Arte y Bellas Artes, esta última enfocada al diseño gráfico, lo que le ha conducido al desarrollo de una técnica que incorpora nuevos medios digitales al arte. Cuenta con una producción ecléctica que encuentra como punto en común la creación de mundos oníricos y misteriosos, a menudo con elementos de suspense que generan sensaciones inquietantes. A este interés por el surrealismo se han ido incorporando facetas del pop a través de la aparición de elementos de la cultura visual contemporánea. Su atmósfera llega así a encuadrarse dentro de lo que a menudo se ha dado en llamar últimamente ‘surrealismo pop’.
La colección de ilustraciones que trae a ‘Mad is Mad’ bajo el paraguas de la exposición ‘Despreocupados, pero no indiferentes’, e impresas en papel y satén, se compone de retratos introspectivos inspirados en La Metamorfosis de Kafka. Los personajes fusionan su faceta humana con flores, animales, insectos, elementos marinos y otros objetos, creando metáforas y juegos visuales que entroncan con el universo de seres híbridos de El Bosco. A esta carga misteriosa del mundo bosquiano, que expresa psicologías mediante la creación de seres en distintas fases de metamorfosis, se suman objetos populares e iconos culturales -desde ‘furbys’ a los troles del tesoro- que permiten al espectador una lectura accesible. Siguen una estética kitsch de colores brillantes y alegres propia de la cartelería antigua y la publicidad de los años 50, pero mantienen una faceta surrealista al revelar pulsiones secretas propias del mundo de los sueños y el inconsciente.
Obra de Susana Murias
SUSANA MURIAS
Susana Murias nació en Madrid. Licenciada en Bellas Artes, ha desarrollado una amplia trayectoria artística que se ha materializado en numerosas exposiciones así como en premios y reconocimientos en el campo de la pintura y la estampa. Entre sus muchas exposiciones, podemos destacar sus muestras de pintura en Annta Gallery y de grabado y estampación en Britta Prinz. Asimismo ha recibido premios y galardones y ha sido seleccionada en certámenes de prestigio internacional. Su obra está presente en la colección de diversas instituciones. Como profesora de artes plásticas y diseño ha impartido materias relacionadas con la comunicación gráfica y el grabado. También ha dirigido talleres y seminarios sobre la escritura y la estampación en instituciones educativas públicas y privadas
Las obras que Susana Murias muestra en Mad in Mad reflejan una mirada singular a través de un lenguaje plástico complejo fruto de muy diversas fuentes. En esta particular forma de expresión consigue sintetizar diversas técnicas en el tratamiento de la imagen con una peculiar dicción que muchas veces recuerda a una forma de escritura personal. En ella, la línea se convierte en un elemento plástico que conecta las formas de la estampa con la expresión del color y proporciona unidad a una composición en la que el espacio vacío desempeña un papel relevante. Pero su imágenes no se quedan en la mera experimentación formal. Muy al contrario, reflejan un mundo de inequívoco contenido poético reconocible en toda su trayectoria artística. Una mirada intensa al mundo de los objetos, a la arquitectura de las sensaciones y a los signos de la memoria, que invita al espectador a entrar en un universo gráfico de múltiples significados.
Obra de Andrés Torres
ANDRÉS TORRES
Andrés Torres ha escrito este texto donde nos invita a conocer sus obras expuesta en Mad is Mad:“Quiero hablar con estas palabras de presentación de lo que se ve, y no de lo que no se ve, porque creo que mi opinión o mi interpretación sobre los dibujos no es más valiosa que la de quien mira los dibujos. La mitad de un dibujo, ya se sabe, la pone quien lo contempla».
Estos dibujos no son dibujos para una exposición. Pertenecen a unos cuadernos que funcionan como diario. Estaban encerrados entre las dos tapas de un cuaderno de Tiger, que son casi los más baratos. Gracias a Mad is Mad me he decidido a arrancar algunas páginas de ese diario que uso como herramienta para pensar la vida.
Pienso la vida dibujándola, aunque la vida, así, con ese nombre, es difícil de dibujar.
Utilizo la línea y la mancha, la tinta y el lápiz, la figuración y la desfiguración. Para describir la fauna y la flora que palpitan bajo la idea de la normalidad.
Estos dibujos ejercen más control sobre mí que yo sobre ellos. Son el resultado de experiencias. Algunos de los retratos son de personas que he conocido. Otros, en cambio, son de personas que quizá voy a conocer. A veces funcionan como predicciones, como augurios. Estoy predispuesto a algunos rostros: los dibujo y luego los encuentro”.
Obra de George Mead Moore
GEORGE MEAD MOORE
En su relación con las plantas, el artista neoyorquino George Mead Moore actúa como lo haría un jardinero y un flâneur. El jardinero camina por el campo sin rumbo fijo, sin pensar en lo que se va a encontrar, y de repente ve una hoja y eso es exactamente lo que quiere dibujar ese día. “Pueden ser dos formas grandes curvadas, puede ser una cadena de anillos de alguna viña, puede ser algo que se parece a un cuchillo, o un paisaje en miniatura”, dice. Las formas abstractas y su fuerte carga asociativa funcionan para George Mead Moore como estímulo. En el origen de la evolución humana el adorno surge así, de las ramas, las hojas y las flores.
De esa recolección de ramas, tallos, hojas y flores, y de su escrutinio, surgen posibilidades plásticas que no sabíamos que estaban ahí esperándonos. Puede ser a través de un cardo, una parra o una acelga. En este sentido, los títulos de las obras son reveladores (Nopal dorado, Lirio rojo, Las hojas del amor, Camello, La noche antes, Entrelazado, Pradera turquesa…). Las hojas nos adornan, pero también hacen volar nuestra imaginación hacia memorias caleidoscópicas de la infancia, fragmentos de luz en una noche violeta, mares de sargazos, algodonosas conchas recogidas en el delta tras la crecida o luciérnagas que parpadean en la tormenta.
Técnicamente, la serie de impresiones digitales que se presentan en Mad is Mad, de 24×24 centímetros, es fruto de un complejo proceso que incluye el dibujo de la planta en grafito, la fotografía del dibujo y la impresión digital sobre papel algodón hahnemuele. La serie resultante es de un gran refinamiento, de un delicado cromatismo.
El jardinero intenta también traspasar la barrera de los sentidos en su serie sobre el cannabis (presentada asimismo en Mad is Mad en impresiones digitales, algunas de ellas coloreadas a mano). Ahí el artista aparece con un buen “colocón”. Las figuras de El Bosco se confunden con ráfagas psicodélicas cuya banda sonora ideal tendría a Deep Purple y Jimi Hendrix como protagonistas.