Nada, absolutamente nada, puede justificar asesinar a casi 40.000 personas directamente (la tercera parte, niños y niñas) y causar la muerte indirecta de otras tantas por enfermedades, estrés y hambre derivados de la invasión israelí.
Nada, absolutamente nada, puede justificar que se trate a millón y medio de personas como si fueran ratones en una sanguinaria trampa haciéndoles huir de un lado a otro durante meses para finalmente bombardearlos.
Nada, absolutamente nada, ni siquiera el ‘truco’ de acusar de antisemitismo a los defensores de los derechos humanos de los palestinos, puede justificar el bombardeo de hospitales, escuelas, ambulancias, monumentos, mezquitas y universidades, el tiroteo a personal humanitario y a gente que espera en una cola para obtener una ración de alimentos, la destrucción sistemática de viviendas, el destrozo de tierras, infraestructuras e incluso cementerios, las torturas y violaciones a presos, la matanza sistemática de médicos, periodistas y personal de ONGs y de Naciones Unidas, el asesinato, sufrimiento y mutilación de niños y niñas, la humillación de los muertos… Muchas de estas acciones cometidas además con burlas y chanzas hacia las víctimas.
Todo esto está pasando mientras las reacciones de los gobiernos del mundo, de los ‘despachos’ del poder, están resultando muy tibias, por decirlo suavemente.
La sociedad debería reaccionar –cada uno, desde su espacio y su entorno, aportando su granito de arena– en la denuncia del genocidio perpetrado por el Gobierno de Netanyahu y en la defensa del pueblo palestino, de Gaza, de su derecho a un Estado íntegro, viable, en paz y en libertad, sin la permanente mordaza asesina de los carceleros sionistas desde hace más de medio siglo.
Rafa Ruiz
La galería Mad is Mad, abierta desde 2005 en el corazón tolerante y libre del barrio madrileño de Chueca, organiza esta exposición con el ánimo de dar visibilidad a una masacre tan cruel que nos lleva a que la Humanidad pierda el sentido de su nombre. Lo hacemos así para aportar nuestro pequeño gesto en defensa de la Paz y la convivencia, en defensa del pueblo palestino, en defensa del regreso de los rehenes injustamente retenidos tanto en el lado palestino como en el lado israelí, en la defensa de que la Humanidad recupere el sentido de la palabra. No podemos ser testigos callados. Debemos alzar todos y todas la voz contra el odio y la sangre.
Para ello, hemos reunido a 22 artistas que, generosamente y con el compromiso por la causa, han donado obras que se venderán a precios muy asequibles en nuestra galería entre los días 17 y 26 de julio.
Todos los beneficios de la venta de estas obras de arte –de amplia temática– serán destinados a UNRWA, la agencia de Naciones Unidas para Palestina, que está siendo acosada y maltratada como nunca se había visto en la historia reciente con un organismo internacional de estas características.
Solo nos queda dar las gracias a todos los que vengáis a apoyarnos –a apoyar a Gaza– para que este genocidio no quede invisibilizado, para que recuperemos la justicia y la paz, el sentido común y la solidaridad, y a los 22 artistas participantes:
En la inauguración (19 h.) contaremos con la actuación de la cantante palestina
RAWAN
Comisariado por Giovanna Ranaldi, Rafa Ruiz y Diego Lara
Todos los beneficios serán destinados a